Salud Pública
¿Qué es el lupus?
El 10 de mayo se celebra el Día Mundial del Lupus, pero, ¿sabes en qué consiste exactamente esta patología?
El lupus eritematoso sistémico (LES) es una enfermedad autoinmune y crónica, que provoca inflamación generalizada y un daño considerable en los tejidos de los diferentes órganos, afectando normalmente a las células sanguíneas, la piel, el cerebro, las articulaciones, los riñones, el corazón y los pulmones. Sabemos que actualmente más de 5 millones de personas en todo el mundo están diagnosticadas de esta patología.
Es una enfermedad que afecta en mayor medida a mujeres que a hombres, donde muchas veces comienza en plena adolescencia, y cuyas causas, aunque hoy día no son del todo conocidas, se sabe que los genes, las infecciones, el ambiente y los virus pueden dar lugar a la aparición de esta enfermedad.
¿Cómo abordamos psicológicamente esta enfermedad que afecta a la calidad de vida de las personas que lo padecen? No estamos solos.
Las consecuencias psicosociales del LES son muy variadas y tras el diagnóstico de esta patología muchas veces la ansiedad y el estrés se hacen eco en el día a día de la persona y de su entorno. Es por ello por lo que es muy importante que desde la psicología se pueda abordar el lupus, teniendo muy en cuenta el manejo de la enfermedad y la imagen corporal, promoviendo un estado físico, psicológico y social lo más positivo posible (Modelo Bio-Psico-Social)
¿Con qué tratamientos se experimentan en la actualidad?
Actualmente los tratamientos cognitivo-conductuales focalizados en la reducción del estrés, están dando buenos resultados, además de los tratamientos centrados en la atención plena, en concreto el programa de MBSR del Dr. John Kabat-Zinn (2004), recomiendo más abajo del Método Palouse que se puede realizar on line de manera gratuita, gracias a la generosidad del Dr. Dave Potter.
La terapia grupal y la psicoeducación son también muy importantes para minimizar el impacto de esta enfermedad en la vida de la persona, y lo que resulta muy positivo es el asociacionismo, sobre todo en los tiempos en los que vivimos; resulta de gran utilidad los foros y grupos de apoyo y de discusión de personas afectadas y allegadas a la enfermedad.
Además la terapia on line con un psicoterapeuta habitual resulta muy aconsejable, especialmente en momentos de fatiga y dolor importante.