A todo el mundo le gustaría sumar, conforme envejece, 7 o 10 años más de vida saludables y libres de enfermedades, ¿verdad? Pues, para ello, hay que intentar eliminar estos cinco malos hábitos de salud: fumar, no hacer ejercicio, tener sobre peso, beber demasiado alcohol y llevar una dieta poco saludable.
Esa es la conclusión de un nuevo estudio, que analizó y relacionó el impacto de esos comportamientos con la posibilidad de vivir una vida más larga sin diabetes, enfermedades cardiovasculares, cáncer y otras enfermedades crónicas.
“Descubrimos que seguir un estilo de vida saludable puede extender los años que una persona viva libre de enfermedades”, explica el autor principal el estudio, el doctor Frank Hu. “En particular, las mujeres que no practicaban esos cinco malos hábitos ganaron más de diez años de vida, libre de enfermedades, y los hombres que tampoco lo hicieron ganaron casi ocho”.
La investigación es una extensión de un estudio publicado el año pasado, que siguió a más de 38 mil hombres durante 28 años y 73 mil mujeres durante 34. Esa investigación encontró que las mujeres, que adoptaron los cinco hábitos saludables a los 50 años, vivieron 14 años más que las mujeres que no lo hicieron.
Por su parte, los hombres que siguieron los cinco factores de estilo de vida a los 50 años, vivieron 12 años más que los hombres que no lo hicieron.
Este nuevo estudio, publicado en la revista BMJ, examinó los mismos datos para ver cómo las enfermedades crónicas afectaban a la calidad de vida de las personas durante el periodo de estudio.
De esta forma, la investigación fue diseñada para ver cómo cinco comportamientos saludables interactuaban para afectar el riesgo de enfermedad: no fumar; mantener un índice de masa corporal saludable por debajo de 25; hacer al menos 30 minutos de actividad física cada día; beber alcohol moderadamente y hacer una dieta de buena calidad.
Hu indica que las mujeres que practicaron cuatro o cinco de los hábitos saludables, vivieron unos 10 años más libre de enfermedades. De hecho, cuando se desglosan por enfermedad, las mujeres más sanas ganaron un promedio de ocho años sin cáncer, diez sin enfermedades cardiovasculares y doce sin diabetes.
Los hombres, por otro lado, aumentaron su esperanza de vida 7 años, con un promedio de seis años más sin cáncer, casi nueve sin problemas cardíacos y más de diez sin diabetes.
No obstante, ¿qué pasa si una persona le fue diagnosticada una enfermedad mientras se encontraba en el estudio? Los datos mostraron que la mitad de las personas diagnosticadas con cáncer vivían 23 años adicionales si adoptaban estos hábitos saludables. Los que decidieron no cambiarlos, vivieron 11 años adicionales. Algo que también ocurrió con las enfermedades cardíacas y la diabetes.
“Este es un mensaje de salud positivo porque significa que los hábitos de vida saludables no solo prolongan la vida, sino que también mejoran la calidad y reducen los sufrimientos relacionados con las enfermedades crónicas”, comenta Hu.
Aun así, el estudio tuvo algunas limitaciones, como, por ejemplo, que los datos sobre la adherencia a los cinco factores del estilo de vida fueron autoinformados, lo que puede suponer que hubiese errores de medición.
¿Qué pasa si no he eliminado estos cinco malos hábitos?
Dicen que nunca es tarde si la dicha es buena, como bien expresa el doctor Hu: “Nunca es demasiado tarde para adoptar estos hábitos. Para los fumadores, lo más importante que se debe hacer es dejar de fumar, mientras que, para los no fumadores, deben tener una dieta saludable y estar físicamente activos”.
