Salud Pública
Declarado el fin del brote de Ébola en la República Democrática del Congo
El 3 de marzo fue un día que se vivió con emoción y alegría en la ciudad de Beni, al noreste de la República Democrática del Congo (RDC). ¿El motivo? Semida Masiko, la última paciente que estaba diagnosticada con ébola en el país, fue dada de alta.
Por ahora, no hay más casos confirmados y por eso se inició la cuenta atrás de 42 días para declarar el fin de la segunda epidemia de ébola más mortal del mundo. Esto se debe a que, principalmente, solo se puede determinar el final del brote cuando han pasado 42 días, desde el último caso informado que haya dado negativo, sin que hayan surgido infecciones.
No obstante, a pesar de que a Masiko se le permitió salir, 46 personas, que habían estado en contacto con ella, están todavía siendo monitorizadas, aunque no presentan ningún síntoma aún. Así, todos los elementos preparados para la respuesta al Ébola siguen en su lugar para, de esta forma, garantizar que cualquier nuevo caso sea detectado y tratado rápidamente.
“Aplaudo los esfuerzos incansables que se han hecho para responder a este brote y estoy realmente alentado por la noticia de que el último paciente con Ébola ha salido sano del centro de tratamiento”, dijo Matshidiso Moeti, Regional de la Organización Mundial de la Salud para África. “Todavía no es el final del Ébola en al República Democrática del Congo. Debemos permanecer vigilantes en las próximas semanas y más allá”.
Los profesionales sanitarios celebraron el alta del último paciente de Ébola con muchísima alegría, bailes y música.
El brote actual, que se declaró el 1 de agosto de 2018, es la décima y la segunda peor en el mundo después de la epidemia de 2014/2016 en África Occidental. Hasta el 1 de marzo, había 3.444 casos confirmados y 2.264 personas fallecidas.
La vigilancia, la detección de patógenos y el manejo clínico están en curso, lo que incluye validar alertas, monitorear los contactos restantes, apoyar el diagnóstico rápido de casos sospechosos y trabajar con miembros de comunidades para fortalecer la vigilancia de las muertes en las comunidades.
La enfermedad por el virus del Ebola, antes llamada fiebre hemorrágica del Ebola, es una enfermedad grave, con una tasa de letalidad de aproximadamente 50 % (en brotes anteriores, las tasas fueron del 25 al 90 %).