Una nueva realidad ha llegado hasta nosotros. El final de la pandemia, tal y como la hemos conocido en este último año y medio, ha llegado a su fin y ahora llega una nueva etapa.
Y en esta nueva fase, los humanos tenemos el poder de tomar decisiones importantes… Porque el mundo post-pandemia, lo construimos cada uno de nosotros con nuestras decisiones cotidianas.
¿Un mundo que se desarrolla hacia fuera?
En el último mes, las imágenes de grandes botellones en diferentes ciudades de España, han llenado los telediarios. He de confesarte que estas imágenes me hicieron perder un poco la esperanza.
Porque durante la pandemia y los meses posteriores, sentía que la humanidad había cambiado, que mucha gente estaba aprovechando los confinamientos y la escasa vida social, para ir hacia dentro, para mirarse de cerca y profundizar en cosas que nunca antes habían visto.
Y casi al final de la pandemia, esas imágenes me impactaron… porque sentía que estábamos retrocediendo de nuevo, volviendo a una manera de vivir que ya no encaja con quienes somos.
La vida social es un eje esencial de los países mediterráneos. Pero no es menos cierto que socializar mucho nos aleja de nosotros mismos, porque sin tiempo para pasar a solas, no podremos explorar nuestro mundo interno.
Y los botellones multitudinarios, son la mejor imagen para comprender cómo dejamos de ser nosotros mismos cuando formamos parte de un grupo grande, donde la responsabilidad se diluye y donde el alcohol tiene la capacidad de desinhibirnos, haciendo cosas que de otro modo no haríamos.
Los seres humanos debemos desarrollarnos hacia fuera y hacia dentro, porque eso nos permitirá desarrollar todas nuestras capacidades.
Construyendo un mundo más consciente
Creo firmemente que la pandemia ha llegado para cambiarlo todo. Y una de las consecuencias positivas, es que la pandemia nos ha dado tiempo… Tiempo para conocernos, tiempo para re-encontrarnos, tiempo para estar con nosotros mismos.
Y todo esto eleva nuestro nivel de conciencia, comprendiendo mejor lo que sentimos y quiénes somos.
Muchas han sido las personas que han decidido dar un giro de 180 grados a su vida, muchas otras han encontrado cosas en su mente que nunca habían visto antes y eso les ha llevado a buscar ayuda psicológica para solucionar lo que no funcionaba bien.
Y ese paso que puede parecer pequeño, es el más grande que han podido dar, porque todo cambia cuando comienzas a conocerte en profundidad.
El mundo post-pandemia será como cada uno de nosotros decidamos. Pero para construir un mundo más consciente, hay algunas cosas que son esenciales…
- Pasar tiempo a solas para conocernos.
- Identificar lo que sentimos y cómo influye en lo que hacemos.
- Perderle el miedo a nuestra mente y conocerla en profundidad.
- Reconocer que creamos nuestra realidad basándonos en lo que sentimos y pensamos.
- Decidir de manera consciente lo que deseamos, más allá de lo que otros quieran.
- Comprender que somos mucho más que nuestro cuerpo y mente… porque somos la conciencia que observa.
- Compartir quiénes somos desde nuestro corazón, siendo genuinos.
Cuanto más conscientes nos volvamos, mejor orientaremos nuestra vida, porque cuando no decidimos de manera impulsiva, empujados por nuestras emociones o por las de los demás, somos más libres.
El mundo post-pandemia puede ser como tú decidas que sea, porque con tu ejemplo y tu manera de ver las cosas, cambias el mundo, aunque sea de poco en poco.
Y tú, ¿cómo quieres vivir en este nuevo mundo?