Ciertamente, las alternativas naturales para el tratamiento de diversas dolencias y usos estéticos han ido ganando cada vez más terreno entre quienes aprovechan sus beneficios con fines terapéuticos y cosméticos. Así pues, prolifera con el mismo auge la producción de CBD para ser utilizado en todas a aquellas áreas donde aporta desde un mínimo de beneficio, hasta aquellas donde es la base de la cadena productiva. De esta forma queda por sentado ante el mundo que hablar de cáñamo es también hablar de un importante aliado para la salud y que puedes encontrar en https://mamakana.es/.
La producción de CBD, en su mayoría, se centra en tres distintos procesos, extracción con aceite, extracción con Co2 y extracción con disolventes, a través de los cuales se busca principalmente separar el CBD de otros tipos de cannabinoides presentes en la planta, como lo sería el THC, causante del famoso efecto psicotrópico. Estos procedimientos permiten obtener, a través de cada una de sus formas, un producto puro, el cual, mediante distintos procedimientos, se logra la extracción del ansiado aceite de CBD.
- Extracción con aceite. Es una de los modos de extracción más utilizados en el proceso productivo, resulta además sencillo y económico de realizar. La activación de los cannabinoides se logra mediante el mezclado de aceite vegetal con la planta decarboxilasada, luego de este paso y mediante calor se extraen los mismos, estos a su vez se unirán al aceite, el cual quedara listo para su uso. La concentración de CBD no será muy alta debido al empleo del aceite en su elaboración, al mismo tiempo que se eliminaran la totalidad de residuos químicos.
- Extracción con Co2. Este método, por su complejidad, resulta uno de los más costosos, ya que para llevar a cabo este procedimiento se requiere de ciertos conocimientos técnicos en el manejo de la maquinaria diseñada especialmente para la obtención del aceite. Para describir el funcionamiento de dicha maquinaria podemos resumir que el Co2 es el principal solvente que permitirá la separación de los compuestos de la planta mediante extractores especiales, consistentes en tres cámaras, siendo la última la que nos permitirá obtener el preciado aceite.
- Extracción con disolventes. Para la obtención del aceite solo se necesita de un solvente químico. Es considerado también la menos recomendable, ya que la probabilidad de que en el producto final queden residuos químicos es muy alta. Los químicos utilizados son generalmente el alcohol, el butano o el etanol, los cuales pueden resultar perjudiciales para la salud, por lo cual el aceite obtenido no debería ser utilizado para usos medicinales.
Sobre la purificación del aceite de CBD
La calidad en la pureza del producto final va a definir el empleo que se le vaya a dar y que productos elaborar. Ciertamente, el proceso de extracción mediante el Co2 es el que mayor grado de pureza ofrece, se usa generalmente para elaboración de productos terapéuticos. La extracción con aceite es muy usado en la elaboración de productos alimenticios, suplementos, etc. debido a las propiedades nutricionales obtenidas del aceite vegetal utilizado en el proceso. Y por último, la extracción con solventes, la cual al no garantizar un producto libre de sustancias tóxicas, su utilización queda en entredicho.
En cualquiera de los tres métodos lo que está garantizado es la anulación del THC, por lo cual no habrá ningún tipo de efecto psicotrópico.