Cuando hablamos de perder peso, pensamos en ir primero al gimnasio y suponemos que hacer ejercicio durante 1 hora y luego evitar comer en todo el día nos ayudará a adelgazar. Pero para ser sinceros, ¡estas estrategias no funcionarán en absoluto! Hacer dietas milagrosas o muy estrictas y dar demasiada importancia al ejercicio son dos de las principales razones por las que la gente no consigue adelgazar.
Entonces debes plantearte si estás obteniendo los resultados que deseas con el método que sigues. Si la respuesta es no, entonces tienes que profundizar un poco más en el asunto. Debes estar cometiendo algunos errores (sin querer) que están obstaculizando tu camino hacia el éxito.
El apoyo y las directrices que se pueden conseguir de expertos, como los de Clínica Menorca, van a ayudar a quienes llevan mucho tiempo esforzándose y están desesperados por ver resultados.
Las razones por las que no consigues adelgazar pueden ser múltiples y, hoy, vamos a hablarte de ellas.
¿Por qué no adelgazas?
Como te decimos, contar con el apoyo de una clínica de nutrición y adelgazamiento es esencial. No solo pueden proporcionarte un programa personalizado de pérdida de peso, sino que podrán enfocarse en mejorar tus hábitos alimentarios y darte apoyo emocional.
Si comes de forma saludable y haces ejercicio, pero no pierdes peso, puede haber una razón. Cuando intentas perder peso, tu cuerpo se defiende. Incluso, al principio puedes perder bastante peso sin mucho esfuerzo, pero la pérdida de peso puede ralentizarse o detenerse por completo al cabo de un tiempo.
Las principales 10 razones por las que no adelgazas a pesar de tus esfuerzos son:
1. Ser poco realista
Es la primera y principal razón por la que no eres capaz de perder peso incluso después de un largo periodo de duro trabajo. No te fijes objetivos poco realistas, esperando perder 15 kg en un mes. Fíjate pequeñas metas, ya que son más alcanzables, y una vez que los alcances, estarás motivado para trabajar más duro, porque una vez que veas los resultados, se convertirá en una obsesión.
2. Comer de forma emocional
Comer se convierte en ocasiones en una actividad para sentirse bien y agradable, para hacer frente a un trauma, para aliviar el estrés, en lugar de para satisfacer el hambre. Los alimentos que eligen los comedores emocionales suelen ser alimentos ricos en grasas, azúcares y calorías, llenos de grasas transgénicas y otros ingredientes tóxicos, extremadamente insanos. Cada vez que sufras un trastorno emocional, no recurras a la comida en busca de consuelo.
3. Dar demasiada importancia al ejercicio
El ejercicio regular puede potenciar los esfuerzos para perder peso, pero por sí solo no conduce a un descenso significativo del peso. La proporción más sana para la pérdida de peso se basa en un 80% en la dieta y un 20% en el ejercicio. Como puedes ver, para perder peso de forma notable, tienes que dar más importancia a la dieta.
4. Dietas milagro
No te fuerces a mantenerte lejos de la comida, porque hacerlo puede afectar negativamente a tu salud. Una dieta de adelgazamiento no debe basarse en privarse de comer y el recorte extremo de calorías. Contar con un plan nutricional que te ayude a perder peso animándote a comer el tipo de comida adecuado en la cantidad adecuada, hará que sigas adelgazando a un ritmo constante.
5. Estrés
El estrés es una de las principales razones por las que fracasan tus esfuerzos por perder peso, porque el estrés crónico no sólo impide perder peso, sino que favorece el aumento de peso, sobre todo de la grasa abdominal. Puedes no tener literalmente nada en tu plato, pero si experimentas demasiado estrés, deshacerte de las capas de grasa extra puede resultar bastante difícil.
6. Depender de pastillas y quemadores de grasa
La mayoría de las pastillas y tratamientos quemadores de grasa que existen no funcionan, sólo te hacen perder peso de agua y no grasa. Lo mejor es evitarlos totalmente.
7. No ingerir proteínas suficientes
Las proteínas son nutrientes esenciales para adelgazar. Comer suficientes proteínas activa el metabolismo, lo cual combate la ralentización causada por la propia pérdida de peso. Además, comer suficientes proteínas te aportará energía y, a largo plazo, te va a ayudar a no recuperar el peso perdido.
8. No dormir bien
Tanto tu salud física como mental se benefician de un buen descanso nocturno, así como lo hace tu peso. Aunque no lo creas se han hecho los suficientes estudios para poder afirmar que existe una relación directa entre no dormir bien y el aumento de peso.
9. No beber suficiente agua
Beber agua tiene muchos beneficios para la salud, pero además ayuda a adelgazar. Está demostrado que beber suficiente agua hace que se quemen más calorías. Además, si bebes un vaso de agua antes de comer, te sentirás lleno y comerás menos.
10. Beber mucho alcohol o bebidas con azúcar
Aunque trates de comer de forma saludable, si sigues consumiendo bebidas azucaradas o alcohol, estás consumiendo calorías que en realidad no te dan la sensación de estar lleno. Un vaso de refresco con azúcar puede equivaler a varias piezas de frutas, mientras que el alcohol tiene 7 calorías por gramo, lo que es mucho.
Presta atención a estos motivos para encontrar el que hace que no estés perdiendo peso y confía en los tratamientos de profesionales como los de Clínica Menorca.
