Nutrición y Dietética
¿Qué es una dieta de ADN?
El ADN, o ácido desoxirribonucleico, es una molécula formada por dos cadenas que se envuelven entre sí para crear la estructura genética o el modelo. Así, el ADN es responsable de proporcionar la información necesaria para crear la estructura y la función de los organismos vivos, incluidos humanos, plantas y algunos virus.
Que una dieta alimenticia se adapte a todos es muy complicado, ya que cada persona y cada tipo de cuerpo es diferente y único. Por tanto, los investigadores se han centrado en un nuevo objetivo: investigar cómo se puede crear una dieta a partir de cada gen en nuestro cuerpo para obtener, de esta forma, una dieta personalizada y adecuada.
Una dieta de ADN trata de superar las dificultades que enfrentan las personas cuando intentan hacer dieta, ya que, en teoría, proporciona una dieta que se basa únicamente en el ADN de un individuo.
¿Por qué se creó la dieta de ADN?
Lo cierto es que la secuenciación del ADN ha permitido examinar varios rasgos genéticos que están asociados con múltiples estados de salud y enfermedades. Aquí entra en juego la nutrigenómica, que es el estudio de la relación entre la nutrición y el genoma humano.
Algunos investigadores y desarrolladores de dietas creen que examinar el ADN de cada persona puede ayudar a determinar qué tipo de dieta sería la más adecuada para la salud del individuo.
Así, las dietas de ADN son creadas por compañías basadas en su interpretación de cómo hasta 100 aspectos de la secuencia de ADN influyen en su salud y en la susceptibilidad a las enfermedades.
De esta forma, en vez de recomendar una dieta para una población, las dietas de ADN hacen recomendaciones basadas en lo que sería lo más saludable teniendo en cuenta la composición de ADN del cliente. Algunas de estas compañías también proporcionan planes de comidas y recetas.
¿Qué desventajas tiene?
Aunque los dietistas están de acuerdo en que no hay una dieta única que sea apropiada para todas las personas, sigue siendo difícil determinar si se recomiendan las dietas de ADN.
Esta no considera riesgos como la obesidad y la anorexia, y no se basa en un cuadro clínico completo de las necesidades dietéticas, las condiciones de salud existentes y los medicamentos.
En este sentido, eliminar un grupo de alimentos de la dieta puede ser peligroso, algo que ocurre en algunas de estas dietas. Por lo tanto, mantener una dieta sana y equilibrada, sin eliminar ningún grupo de alimentos, es esencial para estar saludable.
Además, es importante destacar que los genes son responsables de explicar solo del 5 al 10% de las enfermedades, como la diabetes tipo 2 y la obesidad. Por ello, es poco probable que las dietas basadas en pruebas de ADN ofrezcan la personalización que defienden.