Un extenso análisis realizado sobre más de 45.000 expedientes médicos electrónicos ha arrojado luz sobre una conexión significativa entre la infección por el virus Covid-19 y el surgimiento de hipertensión arterial.
A pesar de que ya se ha constatado que la Covid-19 tiende a ser más severa en individuos previamente afectados por hipertensión, quienes enfrentan esta afección presentan tasas más elevadas de hospitalización y mortalidad en comparación con aquellos con niveles normales de presión arterial.
Tim Q. Duong, profesor de Radiología en la Facultad de Medicina Albert Einstein, habla de la relación entre ambas enfermedades «Aunque está claro que existe una relación entre la Covid-19 y la hipertensión arterial preexistente, evidenciada por tasas de hospitalización y mortalidad aumentadas junto a la hipertensión, no se sabía si el virus SARS-CoV-2 tenía la capacidad de desencadenar por sí mismo el desarrollo de la hipertensión o si podría intensificar la hipertensión preexistente».
Los datos médicos recopilados de los expedientes electrónicos abarcan a 45.398 individuos afectados por Covid-19 (hospitalizados entre marzo de 2020 y febrero de 2022) y 13.864 personas con gripe sin Covid-19 (hospitalizadas entre enero de 2018 y febrero de 2022), quienes regresaron al entorno hospitalario por diversas razones médicas durante un período promedio de seguimiento de seis meses.
Detección de hipertensión en pacientes de riesgo
Los resultados revelaron que el 21% de las personas hospitalizadas por Covid-19 y el 11% de las no afectadas por la enfermedad desarrollaron hipertensión, cifras que contrastan con el 16% de las personas hospitalizadas por gripe y el 4% de las que no tuvieron que ser hospitalizadas por esta afección.
Adicionalmente, se encontró que las personas hospitalizadas por Covid-19 presentaron más del doble de probabilidades de desarrollar hipertensión crónica en comparación con las personas hospitalizadas o no hospitalizadas por gripe.
Además, se encontró que fue más común entre las personas infectadas con el SRAS-CoV-2 que recibieron tratamiento con vasopresores y corticosteroides durante la pandemia.
«Estos resultados deberían intensificar la atención hacia la detección de hipertensión en pacientes de riesgo después de recuperarse de la Covid-19, permitiendo la identificación y el tratamiento tempranos de las complicaciones asociadas», señala Duong.
Los investigadores destacaron que la mayoría de los participantes en el estudio provenían de comunidades con bajos niveles socioeconómicos, lo que podría aumentar su vulnerabilidad al desarrollo de hipertensión después de la infección por Covid-19.