Los cambios en la microbioma pulmonar pueden ayudar a predecir cómo responderían los pacientes críticos a los cuidados, según una nueva investigación publicada en la revista online de la Sociedad Americana Torácica.
El autor del estudio, titulado “Lung Microbiota Predict Clinical Outcomes in Critically Ill Patients”, los pacientes con altos niveles de bacteria pulmonar un día después del ingreso en UCI estuvieron menos días sin ventilación, un efecto extraño que no tiene explicación por la gravedad de la enfermedad crítica y la presencia de neumonía.
Así, la identidad de la microbiota pulmonar (cuya bacteria fue detectada) también fue predictiva en los resultados de pacientes en UCI. De hecho, dos bacterias normalmente encontradas en el intestino (Lachnospiraceae y Enterobacteria spp) aparecieron en la microbioma intestinal de los pacientes que tuvieron peores resultados en la UCI.
La presencia de Enterobacteria spp en el microbioma pulmonar estaba también asociada con el síndrome agudo de dificultad respiratoria, o ARDS (Acute Respiratory Distress Syndrome), una amenaza de muerte para enfermos en los cuales hay una inflamación severa de los pulmones.
El equipo de investigadores, en estudios previos, encontraron también que la función inmune de pacientes con ARDS es altamente variable y que la translocación de bacteria intestinal a los pulmones quizá jugase un papel en el desarrollo del ARDS. En otros estudios recientes, los investigadores descubrieron que la microbioma pulmonar en pacientes con fibrosis pulmonar idiopática también predice los resultados clínicos.
Un nuevo objetivo para prevenir las enfermedades graves
El microbioma humano comprende el material genético de unos 100 billones de microbios. Además, la bacteria es el mayor componente del microbioma, pero este también incluye un virus, hongos y arqueas.
A diferencia del genoma humano, que es relativamente estático, el microbioma es alterado, a veces drásticamente, por la dieta, enfermedades u otros factores. Por ejemplo, mientras el pulmón ha sido considerado históricamente estéril, en la década pasada, los investigadores usaron métodos, basados en el ADN, que revelaron la diversidad y dinámica de comunidad bacteriana que contenía el pulmón.
“Nosotros ya sabíamos que la microbiota se alteraba potencialmente en enfermos críticos y que dicha interrupción está asociada con la alteración de la inmunidad pulmonar”, explicó el Robert Dickson, profesor asistente de cuidados críticos, medicina pulmonar y microbiología e inmunología de la Universidad de Michigan. “Lo que el estudio actual nos dice es que esta interrupción de la microbiota pulmonar es clínicamente significativa”.
En sus estudios en los que participaron 91 enfermos críticos, los investigadores controlaron la gravedad de la enfermedad y si el paciente tenía neumonía, lo cual podría incrementar el número de bacterias del microbioma pulmonar. Tras tener en cuenta estos factores, la asociación entre menos días de ventilación, el nivel de bacterias y la detección de bacterias intestinales en el microbioma pulmonar continuaba.
De esta forma, se animó a los investigadores puesto que el microbioma pulmonar puede representar un nuevo objetivo para prevenir y tratar las enfermedades graves.
“La microbioma es algo que podemos manipular potencialmente, a diferencia de otros factores de riesgo en la UCI”, indicó el autor y director Lieuwe Bos, investigador en neumología y cuidados críticos y neumólogo en formación de la Universidad de Medicina de Ámsterdam. “Nosotros no podemos cambiar los genes de nuestros pacientes o sus enfermedades crónicas, pero podemos cambiar potencialmente sus cuerpos, la microbiota”.
Limitaciones y futuro
Las limitaciones de los estudios incluyen el hecho de que los investigadores no pueden controlar los medicamentos, incluyendo los antibióticos, que los pacientes tomen antes de ser ingresados en la UCI. Por eso, los investigadores no pueden determinar si las bacterias intestinales encontradas en el microbioma pulmonar de algunos pacientes habían emigrado desde el tracto gastrointestinal o inferior o si se encontraban en los pulmones debido a la aspiración o inhalación accidental de alimentos o líquidos.
Los investigadores dicen que el siguiente paso para el campo será determinar si la modificación de estas bacterias pulmonares influye en los resultados de los pacientes. Una tarea que, según indican, requerirán estudios prospectivos en humanos y en animales con enfermedades críticas.
“La predicción de resultados en UCI es importante, pero lo que nosotros realmente queremos es conseguir un objetivo terapéutico”, explicó el doctor Dickson, que añadió: “Nosotros tenemos que averiguar si el microbioma pulmonar es algo que podemos modificar, ya sea para prevenir una lesión pulmonar o para ayudar a una rápida resolución de una enfermedad”.
“Los pulmones de pacientes con ASDR no son todos iguales. Conociendo que la función inmune y la microbioma difiere entre estos pacientes puede ayudarnos no solo a predecir los resultados de estos, sino a cambiarlos para mejor”, indicó.