En España, ¿cuál es la situación de esta especialidad de medicina? ¿Considera que tiene el reconocimiento que se merece?
La situación de la especialidad en España es complicada porque desde hace tres años no salen nuevos especialistas debido a que se tiene que restablecer el sistema de obtención del título a través de la formación como residente en Medicina del Deporte. Teníamos muy avanzado el trabajo con la Dirección General de Ordenación Profesional con el Ministerio de Sanidad y que se iba a hacer mediante un Real Decreto similar al que se ha utilizado con Medicina Legal, de hecho, ya tenemos preparado un excelente programa de formación y de acreditación, pero con la incorporación del nuevo equipo se ha detenido momentáneamente este proceso. Sabemos que el nuevo Director General es sensible a este tema y se nos ha comentado que retomaremos el tema en cuanto se lo permita su apretada agenda. Estoy convencido de que retomaremos la formación para la obtención del título de especialista de forma totalmente satisfactoria.
Desde su punto de vista, ¿cuál es el papel que realmente ha de ejercer esta especialidad para la sociedad?
Indudablemente el cuidado de la salud del deportista, como función clásica de la especialidad, que tiene una labor enormemente creciente debido al enorme número de practicantes de deporte en España (más del 40% de la población realiza deporte regularmente dos veces por semana).
Pero la especialidad de Medicina del Deporte es la única que puede aportar una solución al enorme problema creciente de la enfermedad crónica y al alto envejecimiento de la población. La sociedad no puede asumir el abordaje de la enfermedad crónica (obesidad, hipertensión arterial, diabetes, cardiopatía isquémica, etc.) solo con fármacos y atención médica. Es imprescindible abordar la incorporación de ejercicio físico en la oferta de los servicios sanitarios de una forma adecuada. Hay muchas Comunidades Autónomas muy interesadas y ya estamos trabajando en ello.
Pese a que las medidas restrictivas no son tan extremas, hay muchas personas que tienen que confinarse y estar días sin salir a la calle. ¿Considera que es necesario que hagan ejercicio físico en el aislamiento?
No solo es necesario, es imprescindible. Actualmente se puede salir a la calle y se puede hacer ejercicio y, si en algún momento hay confinamiento domiciliario, se debe realizar ejercicio en casa. Nosotros tenemos pautas de realización de ejercicio domiciliario que hemos hecho públicas.
¿Qué beneficios físicos y mentales puede ofrecer el deporte a estas personas que se encuentran aisladas?
¡Todos! El ejercicio físico tiene efectos beneficiosos sobre prácticamente todos los sistemas y aparatos del organismo: cardiovascular (reduce la frecuencia cardiaca, la tensión arterial, mejora el riego coronario, previene la morbimortalidad de origen cardiovascular incluyendo el ictus), respiratoria (mejora la función respiratoria), metabólica (reduce peso, grasa y colesterol), locomotor (mejora la fuerza, coordinación, autonomía, disminuye el riesgo de caídas), disminuye el riesgo de determinados tipos de cáncer, neurológica y psicológico (menor riesgo de enfermedades neurológicas, mejora de la autoestima, menos estrés y ansiedad), etc.
Salir a practicar deporte con mascarilla, ¿influye en el rendimiento deportivo?
Estamos avanzando en el conocimiento del efecto de la mascarilla en el ejercicio. Concretamente estamos llevando a cabo un estudio en este sentido y parece que el uso de mascarilla puede dificultar el rendimiento en esfuerzo máximo, pero no en esfuerzos de tipo medio.
¿Cómo ha afectado la pandemia de la Covid-19 a su especialidad?
De una manera importantísima por la suspensión de las competiciones y por la dificultad de realizar algunas exploraciones como las pruebas de esfuerzo. Además, ha habido federaciones que, en lugar de recomendar realizar reconocimientos médico-deportivos con más importancia que anteriormente por los descritos efectos de esta nueva enfermedad y que pueden afectar a deportistas que la han padecido de forma asintomática, han pretendido prorrogar la validez de los certificados anterior, algo que es absolutamente ilegal.
¿Cómo aporta su granito de arena la Sociedad Española de la Medicina del Deporte en la lucha ante el nuevo coronavirus?
Desde el primer momento se asumió la responsabilidad que tenemos como médicos y hemos realizado actuaciones destinadas a los practicantes de deporte, a la población con enfermedad patología crónica, a los profesionales de la Medicina y Medicina del Deporte. Hemos estado atentos a lo que iba sucediendo y hemos contactado con las autoridades y federaciones cuando se ha considerado oportuno. Hemos dado información a todos los médicos de comunicación que nos lo han solicitado y que han sido muchos, y hemos puesto en marcha, junto con la Universidad Carbólica de Murcia (UCAM), un trabajo de investigación sobre los efectos de las mascarillas en el rendimiento deportivo. En nuestra página web (femede.es) están disponibles todos los materiales elaborados.
Centrándonos en el ejercicio físico en sí, ¿se podría considerar caminar a paso ligero como hacer ejercicio físico?
Desde luego que sí, de hecho, es el patrón oro del ejercicio físico para luchar contra el sedentarismo, porque se considera que es apropiado y accesible para las personas que tienen más limitaciones y es el que menos efectos secundarios presenta. Tiene enormes beneficios y es el más indicado para reducir peso.
¿Hasta qué punto puede el ejercicio físico prevenir enfermedades?
Ya se ha indicado que el ejercicio físico es extraordinariamente beneficioso para el manejo de más de 35 enfermedades crónicas de enorme prevalencia y, en muchas de ellas existe una potente evidencia científica de su efecto preventivo.
