Enfermería
España necesita más de 120.000 enfermeras/os para llegar a la media europea
En Granada se ha realizado recientemente un encuentro entre enfermeros y pacientes con el objetivo de mejorar la relación entre ambos. Durante el evento, enfermeras que trabajan en el ámbito de la salud mental contaron la necesidad de preguntar a pacientes y familiares para conocer mejor sus preocupaciones, necesidades, expectativas y deseos. La importancia de la escucha activa y la comunicación emocional fueron algunos de los temas clave que se trataron en el encuentro.
Trabajar con pacientes también requiere habilidades en la comunicación emocional, lo que implica reconocer el componente emocional para poder identificar mecanismos que puedan ayudar al paciente y a su familia a hacer frente a las situaciones. Las habilidades de escucha afectan la relación profesional-paciente y si los profesionales tienen dificultades para ello, puede dar como resultado timidez e ignorancia.
Cada encuentro con el paciente es una oportunidad de escucha activa, con posibilidad de recoger información y conocer sus preocupaciones. Además, es importante tener en cuenta el espacio en el que se da la comunicación, que debe favorecer la intimidad y la confidencialidad, y también dar a cada paciente el tiempo necesario para expresar sus problemas con tranquilidad, creando un ambiente apropiado.
Ratio más bajo de enfermeras por cada 1.000 habitantes
España necesita, de media, más de 120.000 enfermeras para llegar a los datos de nuestros vecinos europeos y pasar de ser uno de los países de la Unión Europea con la ratio más baja de enfermeras por cada 1.000 habitantes: 5,9 frente a las casi 14 de Alemania. Mientras que Aragón (5,8) y el País Vasco (5,1) encabezan la lista con una ratio que supera las cinco enfermeras por 1.000 habitantes, otras como Andalucía (3,3) o la Comunidad Valenciana (3,4) no llegan ni a cuatro profesionales, según los últimos datos disponibles de 2019.
La falta de enfermeras en el sistema sanitario tiene consecuencias negativas para los pacientes, ya que aumenta la mortalidad en el caso de los hospitales. Estudios demuestran que por cada paciente que añades a una enfermera por encima del ratio considerado ideal, una enfermera por cada seis o siete pacientes, la mortalidad aumenta entre un 7% y un 8%. Y en el caso de unidades de cuidados intensivos, un 9%.